Hábitos saludables populares: ¿mitos o verdades?

Lo primero que uno hace cuando comienza una dieta es generar hábitos de consumo propio basado en lo que se conoce sobre la alimentación saludable. La cuidadosa selección de alimentos que se consume es esencial para llevar a cabo un estilo de vida sano y fortalecer el organismo con los nutrientes que trae consigo la alimentación. 

Una vez que se comienza la dieta y se empieza a adquirir hábitos más saludables, es importante estar informado y conocer lo que uno está ingiriendo e incorporando al cuerpo, porque son varios los hábitos que se han normalizado con el tiempo y popularizado, pero que resultan ser solo mitos y pueden afectar negativamente la dieta que se está llevando a cabo. 

Algunos mitos sobre los hábitos de alimentación saludables

  • Beber agua durante las comidas dificulta la digestión: Es una creencia falsa, según explican los especialistas, quienes incluso plantean que es deseable tomar agua durante las comidas. El agua es necesaria para que el organismo esté bien hidratado y es vital para la salud. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda un consumo de dos litros y medio al día para personas sanas con actividad física normal.
  • El consumo de huevo eleva el colesterol: Un análisis de la Universidad de Harvard de 215.000 personas descubrió que comer un huevo por día no está asociado con un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular, sino que los investigadores detectaron que contribuye a proteger el organismo. 
  • No consumir carne puede ser perjudicial para la salud: Cada vez más personas dejan de consumir carne para incorporar una dieta vegetariana, pero muchas veces se critica este hábito por la supuesta falta de nutrientes que presenta el vegetarianismo o veganismo. Esta creencia es falsa: por el contrario, los estudios afirman que quienes llevan adelante una dieta vegana o vegetariana son propensos a sufrir menos accidentes cardiovasculares a largo plazo.
  • Alimentación vegana es sinónimo de dieta saludable: Ser vegano no es sinónimo de saludable ya que se puede caer en el consumo de solo productos ultraprocesados o repletos de gluten, llegando a presentar una carencia de varios nutrientes. Se puede comer sano siendo vegano, pero no se da en todos los casos. Por eso, es fundamental el acompañamiento de un nutricionista para evitar las carencias. 
  • Tomar jugo de apio por la mañana en ayunas ayuda a quemar grasas: Varios deportistas y celebridades promueven el consumo de jugo de apio durante 21 días consecutivos a la mañana y en ayunas para que el cuerpo absorba de manera eficiente todos los nutrientes. La tendencia nace del gurú de nutrición norteamericano Anthony William, conocido en las redes como Medical Medium, con más de 4 millones de seguidores en Instagram. Pero los expertos en nutrición afirman que esto solo se trata de un mito. El jugo de apio no ayuda a quemar grasas; lo que sí lo hace es una alimentación saludable y sostenida en el tiempo, acompañada de la actividad física.
  • Una rodaja de pan integral aporta menos calorías que una de pan blanco: El pan integral no funcionará si el objetivo de la dieta es bajar de peso. La diferencia entre ambos tipos de pan se encuentra en que el integral conserva todos los elementos del grano de trigo y, con ellos, todos sus beneficios nutricionales; por el contrario, al pan blanco se le han retirado el salvado y el germen en el proceso de “refinación” de la harina, dejando únicamente el almidón. Es decir, los aportes más importantes, como fibra, minerales y algunas vitaminas, se eliminan en las harinas refinadas. Además, los productos elaborados a partir de harinas integrales suelen ser buenos aliados a la hora de controlar el apetito.

Estos son algunos de los mitos que deben tenerse en cuenta para llevar a cabo una alimentación saludable. Aún así, lo ideal es en primer lugar, estar informado e investigar a través de fuentes verídicas, pero principalmente recurrir a un médico que guíe y brinde ayuda para incorporar alimentos variados para un estilo de vida saludable. 

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