Se sabe que en los últimos diez años, los divorcios crecieron de forma estrepitosa. Ni hablar luego de los meses de confinamiento que trajo la pandemia, en donde miles de personas conocieron de forma real a su pareja, generando miles de malentendidos que llevaron, en consecuencia, a millones de rupturas y relaciones terminales.
Hay muchos motivos que pueden llevar al fin de una pareja. Uno de los más comunes es el hecho de que no haya comunicación efectiva, ya que la incapacidad para expresar sentimientos, resolver conflictos de manera constructiva o compartir objetivos y expectativas puede llevar a un distanciamiento emocional que eventualmente conduce al divorcio. De hecho, según datos recopilados, aproximadamente el 65% de los divorcios se atribuyen a problemas de comunicación.
Otro motivo importante es la infidelidad. Las relaciones extramatrimoniales pueden erosionar la confianza y la intimidad en el matrimonio, y para muchas parejas, la infidelidad es vista como una violación irreparable de la confianza y el compromiso. Según estadísticas, alrededor del 45-50% de los divorcios se relacionan con asuntos extramatrimoniales.
Por su parte, los problemas financieros también pueden contribuir significativamente a las tasas de divorcio. El estrés financiero, las dificultades para administrar el dinero y las diferencias en las expectativas económicas pueden generar tensiones constantes en la relación. Se estima que aproximadamente el 30% de los divorcios tienen raíces financieras, lo que subraya la importancia de la estabilidad económica en la salud de una relación.
En contrapartida, las estadísticas también sugieren que aproximadamente el 25-30% de los divorcios pueden atribuirse a problemas de compatibilidad o diferencias irreconciliables entre las parejas. Estos problemas pueden manifestarse de diversas maneras, como falta de conexión emocional, discrepancias en la crianza de los hijos, desacuerdos sobre el manejo del hogar o simplemente sentirse en caminos separados en la vida.
Si bien las razones para divorciarse son infinitas, también hay miles de formas de evitar que eso suceda. Los expertos en relaciones románticas brindaron diez consejos que se pueden aplicar para poder aceptar al otro como es y trabajar de manera conjunta para poder evitar llegar a una ruptura. Cada uno de ellos es fácil de aplicar y puede generar grandes resultados en la relación.
LOS 10 CONSEJOS CLAVES PARA CUIDAR LA PAREJA, SEGÚN EXPERTOS
1. Comunicación efectiva: la comunicación abierta y honesta es fundamental en cualquier relación. Aprender a expresar tus sentimientos, necesidades y preocupaciones de manera clara y respetuosa, y estar dispuesto a escuchar a tu pareja de la misma manera, fortalecerá la conexión emocional entre ustedes. Es fundamental encontrar momentos para hablar de cosas complicadas, y comprender qué lo que puede ser algo pequeño para uno, puede generar gran estrés en otro.
2. Respeto mutuo: el respeto es la base de cualquier relación exitosa. Tratar a tu pareja con cortesía, consideración y empatía. Valorar sus opiniones, sentimientos y perspectivas, incluso si no estás de acuerdo con ellos. Eso hará que la otra persona no se sienta burlada o incomprendida, lo cual no puede existir en una relación que es de a dos. Es clave poder ser empático en cualquier tipo de relación.
3. Aprecio y gratitud: expresa regularmente tu aprecio por tu pareja y por las cosas positivas que aporta a la relación. Reconoce y agradece los esfuerzos que hace por uno y por la relación, ya sean grandes o pequeños. Generará, en consecuencia, que la otra persona pueda encontrarse con ganas de seguir trabajando por el bienestar de ambos. Solamente el aprecio por el otro puede colaborar.
4. Tiempo de calidad juntos: a pesar de lo difícil que pueda ser eso en la vida ajetreada, dedicar tiempo regularmente para compartir momentos significativos juntos puede marcar una gran diferencia en la forma en la que funciona la pareja. Esto puede incluir citas, actividades compartidas o simplemente conversaciones íntimas. Priorizar el tiempo de calidad fortalece el vínculo emocional.
5. Apoyo mutuo: estar ahí el uno para el otro en momentos de alegría y dificultad es esencial. Ofrecer apoyo emocional, escucha activa y brinda ayuda práctica cuando tu pareja lo necesite. Es fundamental ser pilar para el otro, porque eso garantizará que también estarán para uno en caso de necesitarlo de esa forma.
6. Aceptar las diferencias: reconoce que ambos son individuos únicos con sus propias personalidades, intereses y puntos de vista. Aceptar y respetar las diferencias entre ustedes, y busca maneras de crecer y aprender juntos a partir de ellas es la clave fundamental para que la pareja pueda durar en el tiempo. Comprender que el otro no es perfecto y dejar de lado la idealización es lo vital.
7. Resolver conflictos de manera constructiva: los desacuerdos son normales en cualquier relación. Aprender a abordar los conflictos de manera calmada y respetuosa, buscando soluciones juntos en lugar de culpar o criticar. Ser aliados en la vida y no contrincantes, funcionar de una sola manera es lo que evitará que la pareja se degrade con el tiempo.
8. Mantener la pasión y la intimidad: el romance y la intimidad física son aspectos importantes de una relación duradera. Cultivar la conexión emocional y física con tu pareja, mostrando afecto y cariño de diversas maneras. Además, es un gran indicativo sobre cómo es la dinámica de la pareja. Cuando las cosas comienzan a salir mal, la intimidad es lo primero que deja de pasar.
9. Crecer juntos: fomentar el crecimiento personal y mutuo en la relación. Establecer metas comunes e individuales, y apoyarse mutuamente para alcanzarlas y celebrando los logros juntos. Solamente el bienestar en la soledad hará que la compañía de una pareja pueda ser apreciado de mejor forma.
10. Compromiso y dedicación: la clave última para hacer que dure una relación es el compromiso mutuo y la dedicación a mantenerla fuerte. Priorizar la relación en tu vida diaria y trabaja activamente en construir un futuro compartido.